mercoledì 30 maggio 2007

Canto Epico al FSLN



Aquí les dejo la letra del Canto épico al FSLN, de los hermanos Carlos Y Luis Enrique Mejía Godoy. Espero que el esfuerzo por transcribir estas canciones de la lucha nicaragüense haya producido un buen resultado.

Desde luego puede haber alguno que otro errorcito en los textos, ruego a los lectores que se den cuenta, que me lo comuniquen para ir corrigiendo.


NICARAGUA NICARAGUITA

Ay Nicaragua, Nicaragüita
la flor más linda de mi querer
abonada con la bendita, Nicaragüita,
sangre de Diriangén
[1].

Ay Nicaragua, sos más dulcita
que la mielita de Tamagá
[2]
pero ahora que ya sos libre, Nicaragüita,
yo te quiero mucho más.

Ay Nicaragua...


EN EL MERO
[3] CORAZÓN DE LAS SEGOVIAS

En el mero corazón de Las Segovias
[4]
donde el jiñocuago
[5] muestra en su piel
el códice de la historia reciente,
ahí donde el malinche
[6]florecido
afila sus machetes en la luna
a sólo dos leguas de El Chipote
[7].

Sandino, Augusto Calderón Sandino,
el hijo natural de Sacuanjoche
[8]
Sandino, Augusto Calderón Sandino
viene a hablar con los suyos.


EL RAPTO

¿Quién es esa muchacha que lleva el guerrillero
en el anca segura de su caballo prieto?
¿Quién es esa chavala alegre y querendona
como una palomita gombomba, gombolona?

Respondieron los valles, los ríos, las cañadas,
junto a los pajaritos de toda la montaña:
ella es la más galana
[9], ella es la más bonita,
ella es la Nicaragua, la Nicaragüita.

¿Quién es esa morena de pelo suelto al viento,
espiga de mozote
[10] pegada al guerrillero?
¿Quién es esa cipota
[11] fragante y transparente,
como un chorrito de agua clarito de vertiente?

Respondieron...

EL NACIMIENTO

Como un chilotito
[12] tierno fulgurante bajo el sol
Nace el Frente Sandinista, mazorca y espiga de liberación,
cada grano fue una bala para conquistar la paz
y levantamos la milpa para la tapisca de la libertad...


LOS ÁRBOLES

Entonces los venerables patriarcas de la montaña,
los árboles, los güegüences
[13] vinieron por los caminos
a conocer al celeque
[14], a conocer al recién parido.

Desde la tupida
[15] cumbre del Kilambé[16] la Ceiba decidió bajar,
milenaria mujer compañera eterna del Cedro Real.

Implacable en el combate será, generoso en la victoria será...


EL MALINCHE
[17]

Al rato llegó el malinche
del cerro del Ciguatepe,
sus penachos colorados
insurrección de machete.


EL CHILAMATE
[18]

Del Güisisil, cerro de Metapa
[19]
llegó el chilamate frondoso y ladino,
como un profeta de lengua sabia
baila con su tronco retorcido.


EL JOCOTE
[20]

Y el jocote, el árbol de los amores
vino desde la vertiente
clarita y pura del Ochomogo
[21].

Y el jocote con sus frutos tronadores
hablantín y zalamero
cundidito
[22] de piropos.


EL ESPAVEL
[23]

El Espavel con su piel de tambor
va declarando a ritmo de quijongo
[24]
será rojito; pispireto
[25] y bravo
como el chile congo
[26], como el chile congo.


EL GRANADILLO

Con su república de pájaros
del mero Coyotepe
el granadillo vino a hablar,
roja-amarilla su cotona
viendo al niño se emociona
y se decide a palabrear...



EL JENÍZARO
[27]

El legendario jenízaro
un lucero de estrellas y trinos
vino desde Nagarote
[28]
y le cantó al cipote
con su voz de siglos.


EL JÍCARO
[29]

El jícaro no dijo una palabra
y al extender su mano hacia la aurora
diez hojas germinaron en sus ramas
diez puños que escribieron esta historia.

Diez retoños creciendo en la alborada
diez huellas imborrables, diez semillas,
diez perfiles rompiendo la oscurana
cargado de futuro y de alegría.


RAITÍ-BOCAY
[30]

Es la primera macoya
[31] del Frente[32]
bajo la lluvia feliz
el corazón galopando
bajo sus rotas camisas
como relámpagos van
invadiendo la selva con su sonrisa.

Cada minuto de gesta gloriosa
látigo de nuestra historia
pioneros en los pantanos
pioneros en los naufragios
y se graduaron de hombres
en el aula de la montaña.

Raití-Bocay
un canto de cayucos guerrilleros,
el grito secular de los tuneros
la patria en el espejo del Wankí
[33].

Raití-Bocay
semilla que cayó en tierra fecunda
génesis de la luz que hoy nos alumbra
la patria en el espejo del Wankí.


PABLO UBEDA
[34]

Se disfraza de espadillo,
se disfraza de mozote
y se convierte en pocoyo,
conejo; garrobo, cusuco
[35], pizote.

Pablo Ubeda pasó
ayer mismo muy temprano,
Carlos Reyna lo encontró
allá en el comisariato.

Pero cómo sucedió
si ayer en la madrugada
el juez de mesta
[36] lo vio
cruzándose la quebrada.

¿Qué será esta confusión
se preguntaba el sargento?
¿no será que este cabrón
es el mentado Cadejo
[37]?

Lo vieron en Kuskawas
[38]
en La Tronca y en Waslala,
ya no lo verán jamás
se lo tragó la montaña.

Lo ayudan los vientos
las siete cabritas
lo oculta el chagüite,
lo esconde la milpa.
La guardia
[39] dispara
contra el cafetal
y sale Pablito sereno,
pajito, bordeando el cañal.

Se disfraza de espadillo...


PANCASÁN
[40]

Cumbre de la coordillera como un puño de granito,
como un gigante escondido, Pancasán
Piedra, barro, arcilla, cubre, roca viva, selva y pino,
la presencia de Sandino, Pancasán.

Pleno sol de rebeldía tras el telón del paisaje
sinfonía del coraje, Pancasán.
Ahí vi a Silvio Mayorga con granadas y poemas
derribando las estrellas, Pancasán.

Y en las aguas coloridas, junto a los tepajonales,
Oscar Danilo Rosales, Pancasán.
Nicolás, Sánches, “El Tigre” en el Cerro Colorado
como un rojo jiñocuago, Pancasán.

Con el primer fogonazo fulgurando en sus pupilas
vas quemando la neblina, Pancasán.


CASIMIRO SOTELO

Casimiro Sotelo, amigo, camarada,
corazón rojinegro, caminante del alba,
nos prometimos juntos plantar un mundo nuevo
partiendo de este dulce furor de nuestro suelo:

Te fuiste con el aire, hermano Casimiro,
para andar clandestino por barriadas y montes,
te vestiste de barro, de limpio barro rojo,
para estar en la fresca tinajita del pobre.

Y pienso, Casimiro, que vuelas y te encumbras,
ávido peregrino, de canciones dolientes,
con tu pasión erguida, tus sandalias de lluvia
por aulas y caminos agitando a la gente.

No te imagino ahora, hermano Casimiro,
en el espacio frío devorando galaxias,
te digo simplemente, hermano Casimiro,
corazón rojinegro, caminante del alba.


JULIO BUITRAGO

En el momento crudo del combate
los héroes no dijeron que morían,
murieron sin decir una palabra
todo el amor cifrado en alegría.

Esa alegría de morir cantando
en julio
[41] fue consigna fulgurante
para construir la patria del mañana
sobre el cimiento rojo de la sangre.


LEONEL RUGAMA

¿Te acordás de aquel muchacho,
del que vendía tortillas?
Se salió del seminario
pa’ meterse a la guerrilla.

Murió como todo un hombre,
allá por el cementerio,
cometió el atroz delito
de agarrar la vida en serio.


LUISA AMANDA ESPINOZA

Como la ropa en las piedras
tu cuerpo quedó tendido
detrás de aquel lavandero
tu blusa de balas tejida.

A mayo se anticipó
en abril fue tu semilla,
dulce y pequeño dolor
sembrada para dar vida.

Luisa Amanda, mujer común,
pequeña, triste, sencilla,
tus manos huelen aún
a metralla y a cocina.

Luisa Amanda, por fin llamó
a tu puerta la mañana
y la patria hizo mayor
tu corazón de muchacha.

La cumiche
[42] de doña Antonia,
la muchacha veinteañera
cuidando nidos viviste
palomita mensajera.

De alero en alero fuiste
clandestina
[43] y pasajera,
en tus manos la esperanza
de campesinas y obreras.

Luisa Amanda, mujer común...


COMANDANTE MARCOS
[44]

Infinitas gracias, Comandante Marcos
por la arcilla pura que labra tu nombre,
infinitas gracias por la Nicaragua
hecha en la medida de tu sueño enorme.

Infinitas gracias, Comandante Marcos,
por la primavera que estrena esta patria,
por la savia nueva que viene creciendo
desde las raíces de tu militancia.

Infinitas gracias, Eduardo Contreras,
comandante hermano, comandante amigo,
comandante escuela, comandante libro,
comandante arado, comandante trino.

(Era en el caminito de San Ididro de la Cruz Verde
Marcos se detuvo ahí con sus compañeros.
Bajo la serena paz de un enorme tamarindo
le vi un arco iris terciado aquí en el pecho:
la banda celeste de los elegidos.
Luego desarmó las piezas de su carabina,
sí, con rayos de luna las fue lubricando
pero en vez de balas en los magazines
tenía claveles y lirios del campo.)


Infinitas gracias Comandante Marcos
por esa estatura de estrella brillante,
por el firme acero de tu frente en alto
por el río rojo que fluye en tu sangre.

Infinitas gracias, Comandante Marcos
porque no hubo escollo para tu bravura,
porque el enemigo con su rabia ciega
no pudo a balazos matar tu ternura.

Infinitas gracias, Eduardo Contreras,
Comandante hermano...


LA GATA MUNGUÍA
[45]

En el telón de la noche,
se lo juro, compadrito,
vi dos estrellas galanas,
dos luceros gemelitos.

¿Serán los ojos brillantes
de un venado lampareado
o quizás la lucecita
de un caserío cercano?

Pero allá en Jocote Tuma
el compadre Gumersindo
le contesta circunspecto
con su acento campesino:

Esas luces que en el cielo
parpadellan serenitas
son dos pupilas chachaguas
patentitas, patentitas,
son los ojos fulgurantes
de Edgar, la Gata Munguía
que nos dicen: Adelante,
ya viene clareando el día.


CARLOS FONSECA
[46]

Un ruido de pájaros predijo tu muerte
y tu sangre dulce floreció en los malinches,
lloró la montaña y el Pájaro León,
y el lucero en la aurora sembró
el sudor de tu frente
y creció en Zinica el amor,
nuestra liberación, capitán y timón,
tayacán
[47] de mi pueblo.

Y seguís disparando con tus ojos azules
emboscando al dolor sin temor a morir,
enseñando a matar, a leer y a escribir,
con el Danto y Pedrón, Benjamín Zeledón,
con Raudales y Claudia y Sandino,
y los miles de niños caídos
y los miles de muertos
que nunca murieron, como vos.

Te mataron cien veces
y cien veces temblaron los cobardes
al verte nuevo y multiplicado
en Bocay y Zinica, en Raití y Pancasán
en un niño aprendiendo a soñar
un maestro, un obrero, un volcán,
un puñado de luz,
un cuaderno, un arado, un fusil,
un ejército y pueblo empeñado en parir
una patria madura y feliz, un poder popular.


OCTUBRE

Octubre no es tan sólo referencia
como un mojón que marca nuestra historia,
octubre es llama traducida en guerra
para prender la cólera del pobre.

Octubre es la lanchita clandestina
con plátanos, con mangos, con piñas y naranjas,
y bajo el tornasol de los jocotes
la guaca
[48] cundidita de bombas y granadas.

Octubre floreció en Sol entíname
con Pelvis, Donad y el Chato Mediano
armados de ternura hasta los dientes,
San Carlos despertó para mirarlos.

Octubre es la lanchita...

Octubre es una escuadra de chocoyos
que rompe la quietud del caserío,
y se van convirtiendo en guerrilleros
para atacar Mozote tempranito.

Octubre es la lanchita...

Octubre es la Foquita disparando
con Israel Lejiítas en Masaya,
octubre, es grito que se va ensanchando,
epidemia de luz que nos contagia.


COMANDANTE FEDERICO

Una lluvia de marimbas, atabales y odaliscas
para pronunciar tu nombre, Comandante Federico,
un machete en cada verso, un martillo en cada estrofa,
para sincerar tu canto, Comandante Federico.

El vuelo azul de un gorrión,
todo un pueblo en combustión
para continuar tu huella,
Comandante Federico.

Una guitarra en mampuesta bordoneando una epopeya
para redactar tu gloria, Comandante Federico,
una bala trazadora disparada hacia la aurora
para resumir tu gesta, Comandante Federico.

El vuelo azul de un gorrión...


CAMILO ORTEGA

Sonaron los atabales, tremolaron las marimbas
todos los alcaravanes repitieron la consigna
empuñando la bandera ojinegra sandinista
Camilo Ortega Saavedra hacia la aurora marchó.

Tu sangre pura, Camilo, va creciendo en las pitahayas
[49],
en la risa de los niños de mi amada Nicaragua,
tu sangre pura Camilo, llamarada en la montaña
derramó sobre mi patria su violenta floración.


JOSÉ BENITO ESCOBAR (usted compañero)

Usted, compañero, es de los de siempre,
de los quijotes, los incurables, tercos,
de los amancebados a plena luz del día
con el rabioso sueño de los pueblos.

Por eso, justamente, no lo olvida el obrero
y su nombre gravita entre las asambleas,
por su actitud honrada, sonora, sin dobleces,
por esa resistencia de mole sensitiva,
por su fe de montaña, más heroica y bravía
que todos los gólgotas unidos de la tierra.


ASALTO AL PALACIO
[50]

(Ideay
[51] mi compa, vengo de Sinaloa del mero terruño de mi Comandante Tirado López).

22 de agosto del 78
en este corrido se los cuento yo
noticias llegadas desde Nicaragua
cuentan que en Managua la cosa empezó.

25 compás
[52] con los uniformes
de los genocidas de Tacho
[53] “El Chigüín”[54]
entraron muy serios al mero Palacio
donde sesionaba el congreso feliz.

Ya los diputados y los senadores
estaban metidos en plena infanzón
manteniendo al filo de leyes funestas
un brutal sistema de ruin opresión.

(Y órale barrigones, como que ya se acabó su cuartito de hora m’hijo)

El tremendo susto de los congresales
cuando la metralla furiosa bramó
ese mismo día la ciudadanía
por primera vez la verdad sesionó.

Algunos ingenuos no entendían mucho
pero se quitaron la duda ahí nomás
cuando un rojinegro pañuelo en el cuello
les hablaba claro de la identidad.

Ahí estaban todos temblando de miedo
Luis Payáis de Baile y Pancito Arenal,
todos preocupados rezando el rosario
porque son los cómplices del caporal.

Dicen que Somoza pegó un brinco padre
[55]
cuando le contaron todito el pastel
igualito a un león encerrado en su jaula
fumaba y fumaba sin saber que hacer.

(Ay, ay, y como no... porque no es lo mismo verla de largo que platicar con ella, oiga)

47 horas es espera angustiosa,
25 compás listos a morir
si Tacho no acepta los puntos del Frente
los peces más gordos se truenan
[56] ahí.

Pasados dos días del operativo,
en este corrido se los cuento yo,
Somoza se daba contra las paredes
y contra su gusto el negocio aceptó.

De la celda oscura salieron los presos,
adelante de ellos camina Tomás,
con la decisión de seguir el proceso
siempre hacia adelante, sin ver para atrás.

Bájate del nido cantor zapatillo,
repite conmigo este hermoso cantar:
Que viva la patria de Augusto Sandino
que marcha seguro a la recta final.


MATAGALPA

El gallo rompió la bruma
[57] entre los pinares,
su canto fue trazadora
[58] en la madrugada,
se alzó un vuelo de pocoyos trasnochadores,
y los guises y zanates se tomaron los traspatios,
las calles y los zaguanes
[59] de Matagalpa.

Hay una mano golpeando de puerta en puerta,
es la patria que nos llama a la insurrección
y en el umbral del Huanuco
[60] a boca’e jarro el paisaje
desenvainó su coraje el septentrión.

Como la orquídea que surge entre los barrancos
Presencio Rosales llama a la juventud
y en sus cajitas de pino, los correos clandestinos
van repartiendo puñaditos de nueva luz.

En El Tule una viejita madrugadora
aliña su burusquita
[61] para el fogón
y apareció el guerrillero, lucero nistayolero
[62]
inaugurando septiembre
[63] con su canción.


ESTELÍ
[64]

Yo soy la mera cascada de La Estanzuela
a sólo veinte minutos del Tomabú,
soy hija de un ojo de agua y una vertiente
soy nieta del gran patriarca el cerro Quiagú.

Yo tengo mi novio allá por la montañita
que nombran por estos valles el Estelí,
hay que verlo pirpireto
[65] cada domingo
con su cotona de manta y calzón de dril.

Estelí, implacable guerrillero
indomable, dulce y fiero combatiente del amor,
Estelí, de los cerros aledaños
baja Dávila Bolaños a cantar tu insurrección,
Estelí, una columna de pinos
descendió por los caminos en perfecta formación
y al llegar bajo el cielo segoviano
como heroicos milicianos se cuadraron ante vos.


EL CASTILLO DE LA CONCEPCIÓN

Soy el Castillo de La Concepción
y tengo tantas cosas que contar,
muchos siglos cabalgan en mi voz
empapada en la espuma del San Juan.

Aún guardo en mis silentes atalayas
el eco austero de lejanos días
cuando una Rafaela iluminada
hundió a la pertinaz piratería.

Pero esta vez pretende mi garganta
de la reciente hazaña hacer memoria,
y vengo a relatarles una gesta
que ya es parte vital de nuestra historia.

Hacia la plenitud del horizonte
yo los miré salir muy de mañana
con sus mochilas llenas de canciones
repletas de fervor y madrugadas.

(Partía el Comandante Montenegro con los enamorados de la patria,
-con 126 hombres enteros... con 126
y sin decir palabra en ese instante, el Raudal se alistó bien tempranito, se fue a Nueva Guinea clandestino en el pelo entrecano de Domingo)


Lo vi en El Chacalín, lo vi en el Río
lo vi llegar al Paso de las Yeguas
ahí el dolor me ladra en los sentidos
y me duele la historia en cada piedra.

Hoy se derrama el sol de la victoria
bañando Mancarrón y La Cigüeña,
en ese botecito de la historia
canaleteando va Felipe Peña.

Comandante Rosendo esta alegría
es fruto sazonado por tu sangre,
Comandante Rosendo ya es de día
mañana seguiremos informando.


EL DANTO

Cantaba el Pájaro León: yo lo vide, yo lo vide,
emboscando al agresor, al tigre de verde-olivo:
La Ceiba y el Cedro Real daban sombra, daban nido
El Jocote, el Frut’epan cursivivas al indio.

Debajo de lo nacido en un árbol legendario
un corazón dulcito es el corazón del Danto,
en su piel dura el dolor repicaba convocando
a la unidad y al amor, Germán Pomares llamando.

Un 24 de mayo su pecho se estremeció
y la tierra segoviana su sangre dulce empapó,
El Danto con su mirada prendió nuestra cordillera
y los ríos arrastraron el fuego de sus arterias.

De la espiga de su puño implacable, dulce y violenta
la nueva milpa nació y la cólera del pueblo
y ahora que las madrugadas de julio son diferentes
es que en toda nuestra patria viejo Pancho estás presente.


LA HUELGA

Unámonos, unámonos, unámonos, unámonos,
juntemos brazos para dar el golpe
juntemos fuerzas para alzar la voz
seamos todos como un hormiguero
juntemos todos ponzoña y ponzoña
juntemos todos dolor con dolor
un granito de arena
otro grano de arena,
y otro y otro.
Una llama se enciende
otra llama responde
encendamos la noche
pongamos el llano en llamas
pongamos el llanto en llamas
pongamos la noche en llamas
y lo nuevo tiene que amanecer.


LA CATEDRAL DE LEÓN

Yo que guardo celosa en mis entrañas
las cenizas ilustres de Darío
he visto transitar ante mis ojos
la gloria, el esplendor y el poderío.

Yo miré el río de la sangre dulce
el 23 de julio memorable
mientras la rancia aristocracia indiferente
en su sueño de mimbre deliraba.

(Aquella noche de septiembre yo miré a Rigoberto. Iba caminando sin vacilaciones hacia la cita exacta con la historia)

Con estos cuatro siglos a mi espalda
abandoné mi rol de monumento
desperté de la bulia y el letargo
me hice miliciana combatiente.

Porque en mis torres se negó la piedra
a ser la pieza muerte del pasado
y cada bloque se volvió trinchera
para fortificar a los muchachos.

De la 21
[66] huyeron los sicarios
al último reducto de Acosasco
[67]
herido el capataz y can severo
los peones de la muerte han claudicado.

Lupe Moreno ataca de sorpresa
el enemigo tiembla en San Felipe
como un mancebo bíblico en la guerra
Abel va ajusticiando a los caínes.

El nombre de Arascely Pérez Darias
irrumpe en la parábola de un grito
su espíritu florece en la batalla
como un madroño erguido al infinito.

Julio explotó con fusiles y canciones
y las casonas coloniales se vistieron
de rojinegra banderas y palomas
y golondrinas milicianas florecieron
en mis aleros contagiados de victoria.



EL REPLIEGUE

No había que pisar ramas ni hacer ruidos con hojas secas
y la orden fue cumplida hasta por la naturaleza
no se oían las chicharras, ni los chayules
[68] ni los ronrones[69],
sólo se oía el latido de todos los corazones
queriendo alcanzar Masaya
[70], queriendo entrar a Masaya,
aquella columna de agua, de sudor y de esperanza,
milicianos combatientes bajo la noche cerrada
mujeres, niños y viejos curtidos por la batalla.

Divisamos Nindirí, territorio liberado,
pero la orden del Frente fue cumplida palmo a palmo,
mantuvimos la cautela para no ser detectados
con su aliento de coraje nos animaba el Santiago
[71].


CANTO FINAL

A 20 años de lucha inclaudicable
juramos defender nuestra victoria
cada gota de sangre guerrillera,
cada bala y cada vida rojinegra.
No habrá fuerza ni técnica ni humana
capaz de detener al pueblo armado
los campesinos, los obreros y estudiantes, milicianos,
defenderemos la revolución.

De norte a sur, de mar a mar
no habrá rincón de nuestra patria sin cuidar
en el ingenio, el cafetal,
en los cortes de algodón y el arrozal.
De norte a sur, de mar a mar...

Siempre será diecinueve,
siempre será veinte y tres,
siempre será julio heroico
avanzando siempre sin retroceder.
Ellos sembraron el sol,
ellos sembraron amor,
y hoy nosotros defendemos la vida
la cosecha encendida,
la Revolución.





NICARAGUA NICARAGUITA

Ay Nicaragua, Nicaragüita
Recibe como prenda de amor
Este ramo de siemprevivas y jilincoches
Que hoy florecen para vos.

Cuando yo beso tu frente pura
Beso las perlas de tu sudor
Más dulcita que la frutita del tigüilote
Y el jocote tronador.

Ay Nicaragua, Nicaragüita
Mi cogollito de pijebaye
Mi pasión se enterró en el surco de tu querencia
Como un granito de maíz.

Es tu saliva alaste y dulcita
Como la savia del marañón
Que restaña con alegría todos los días
Mi rebelde corazón.

Ay Nicaragua, Nicaragüita
la flor más linda de mi querer
abonada con la bendita, Nicaragüita,
sangre de Diriangén
[72].

Ay Nicaragua, sos más dulcita
que la mielita de Tamagá
[73]
pero ahora que ya sos libre, Nicaragüita,
yo te quiero mucho más.

[1] Cacique conocido como el padre de la historia de Nicaragua.
[2] Nombre de lugar
[3] El centro, el propio
[4] Zona montañosa del norte de Nicaragua donde luchó Sandino
[5] Árbol
[6] Árbol
[7] Un cerro
[8] Sacuanjoche, la flor nacional de Nicaragua, flor del Madroño. De las voces Náhuatl “zacuani” que significa amarillo y “xotchil” que significa flor
[9] Galena, en nicaragüense femenino de Galán
[10] Planta de espigas que al pasar se pegan en la ropa de los pasantes
[11] Cipote, Cipota, niño/a, jovencita
[12] Chilote, mazurca de maíz tierno
[13] El güegüence o macho ratón. Primera obra literaria nicaragüense de la que se tiene noticias. El güegüence es un “indio” que usa toda su forma pintoresca de ser para burlarse del gobernador español. Güegüence, sinónimo de nicaragüense en el alma
[14] Celeque, un niño recién nacido, el retoño de una planta
[15] Tupido, frondoso
[16] Cerro del norte de Nicaragua, 1700 mts de altura aproximadamente
[17] Malinche, (Delonix regia). Árbol representativo de la lucha por la liberación. Símbolo de fertilidad y de victoria
[18] Chilamate, es un ficus (posiblemente Lapahifolia)
[19] Posiblemente hace referencia al lugar de nacimiento de Rubén Darío
[20] Spondia purpurea
[21] Un río
[22] Lleno, repleto
[23] Anacardium excelsum
[24] El quijongo, usado probablemente por los Chorotegas (Nicoya), es una vara de madera flexible tendida en forma de arco por una cuerda de cáñamo, y que lleva sujeta en el centro una pequeña jícara que sirve como caja de resonancia, aunque a veces era reforzada apoyando la base del Quijongo en otra caja. Se ejecutaba por pulsación sobre la cuerda bien templada; al descubrir y cubrir alternativamente la boca de la jícara con los dedos de la mano, se producía un sonido oscilado como el viento al silbar entre los bosques, variando en cuartos y sextos de tono.
[25] Valiente, atrevido
[26] Ají picante diminuto, de color rojo tendiente al morado, de sabor fuerte. Sinónimo de fuerza y de valentía
[27]
[28] Poblado cerca de la ciudad de León
[29]
[30] Lugar histórico para la guerrilla que combatió la dinastía somocista. En Raití-Bocay, cayó el Comandante Carlos Fonseca, héroe matagalpino fundador del FSLN
[31] La primera macoya, el primer retoño, el primer grupo de insurgentes, de revolucionarios
[32] FSLN, Frente Sandinista de Liberación Nacional, fundado por Carlos Fonseca, Tomás Borge, Silvio Mayorga, etc. Organización clandestina, revolucionaria, hoy principal partido político de izquierda, que concibió la lucha armada como único medio de liberar a Nicaragua de Somoza
[33] Un río miskito
[34] Mártir sandinista
[35] Armadillo
[36] Juez de Mesta, civil que colaboraba con la Guardia de Somoza en la búsqueda de los guerrilleros y tenía poder de decidir la muerte de cualquier persona se sospechase fuera guerrillera
[37] Figura representativa de los cuentos populares nicaragüenses. Un cadejo se esconde, aparece y desaparece en todas partes
[38] Nombre de río. En lengua miskita, WAS significa río
[39] Se refiere a la Guardia Nacional. El ejército de represión del dictador Somoza
[40] Alude al glorioso combate del 27 de agosto de 1967 conocido como “la gesta heroica de Pancasán”, acción guerrillera de los sandinistas considerada como una derrota militar y un triunfo estratégico ante la GN.
[41] Alusivo a Buitrago y al mes de julio, mes de importantes gestas heroicas

[42] El/la cumiche, el hijo menor de una familia
-
[43] Andar clandestino se utilizaba para significar andar en la guerrilla, juntarse al FSLN
[44] Seudónimo de combate del Comandante Eduardo Contreras
[45] Edgar Munguía, combatiente mártir, de ojos claros llamado por eso “el gato” o “la gata” Munguía
[46] Padre de la revolución popular sandinista
[47] Proviene de un árbol de madera fuerte, dura. Tayacán: fuerte, héroe, combativo
[48] Especie de vasija de barro que los campesinos utilizaban para guardar bajo tierra sus cosas de valor. Alusivo al os buzones clandestinos que los guerrilleros utilizaban para enterrar sus abastecimientos de municiones
[49] Fruto rojo sangre de la familia de las cactaceas, símbolo de la lucha por la vida, (Stenocereus thurberi)
[50] Gesta heroica de guerrilleros del FSL que en agosto del 78 se tomaron el Palacio Nacional donde sesionaban los diputados y senadores del dictador. Entre las condiciones que pidieron para salirse estaban la liberación de Daniel Ortega Saavedra, Tomás Borge Martínez y otros guerrilleros que tenían varios años de estar en las cárceles
[51] Interjección para saludar
[52] Nombre con el cual se reconocía a los guerrilleros, compa abreviatura de compañeros, sinónimo de guerrillero sandinista
[53] Anastasio
[54] Chigüín: niño, hijo, muchacho. Nombre con el que se conocía al hijo del dictador4
[55] enorme
[56] Lenguaje popular, tronarse a alguien: ajusticiar
[57] Niebla de la mañana
[58] Trazadora: es una bala que al ser disparada deja una luz intensa de tal forma que se puede seguir su trayectoria. Se utiliza para delimitar la zona de fuego
[59] Zaguán: portón. En la clandestinidad las casas que apoyaban a los guerrilleros abrían repentinamente sus portones para dejarlos entrar y luego los cerraban para que no fueran capturados por la GN. Estas casas se llamaban casas de seguridad
[60] Nombre de un barrio matagalpino
[61] Burusca, recoger burusca: recoger ramitas secas para encender el fuego o el fogón
[62] Niztayolero, voz nahualt, originaria de nezquil. Tal vez hace referencia a la poesía de Cardenal donde el lucero niztayolero es la estrella del alba, el planeta venus, el día que nace
[63] Septiembre, mes en que Matagalpa celebra su santa patrona: la virgen de Mercedes
[64] Estelí, ciudad tres veces heroica, destruida tres veces por los aviones y bombardeos del dictador
[65] Bastante despierto,
[66] La 21, nombre de uno de los comandos de la Guardia Nacional
[67] Ídem
[68] Animalillo diminuto y fastidioso como un zancudo
[69] Ronron, escarabajo
[70] Masaya, ciudad heroica poblada por indios Monimbó, centro de la guerrilla y de la represión
[71] Cerro
[72] Cacique conocido como el padre de la historia de Nicaragua.
[73] Nombre de lugar

martedì 29 maggio 2007

EL MUNDO QUE ESTAMOS DEJANDO EN HERENCIA

Hay una frase que los viajeros escuchan con cierta frecuencia al acontecer de algunas casualidades: “¡qué chiquito que es el mundo..! Parece que la globalización haya, entre tantas virtudes y defectos, abatido las fronteras y permitido que el mundo del comercio se mueva de país en país sin que las anteriores barreras aduaneras o tarifarias puedan ya controlar el eterno vaivén de productos que llegan a (y salen de) cualquier país. No así las personas.
Estuve dando un par de conferencias en la Universidad de Roma “La Sapienza”, en la cátedra de Historia de América Latina y abordando apasionadamente los temas que consideraba de interés debatía con mis alumnos / colegas los pro y los contra de los varios acuerdos comerciales del continente americano. Al abordar el Tratado de Libre Comercio de América del Norte (NAFTA, por sus siglas en inglés), la profesora Salvetti me sorprendió con una observación: “entre México y los Estados Unidos los productos del mercado pueden transitar libremente... es a las personas que disparan”, aludiendo a la tristemente célebre historia de los que atraviesan mojados el río Grande (frontera mejicana con Texas) en búsqueda del sueño capitalista; y de los agentes del Servicio de Inmigración y Naturalización (INS, por sus siglas en inglés) que desde el otro lado tratan de detenerlos disparándoles...

Inútil recordar la “diplomacia” estadounidense en relación con Nicaragua. Los Melton y los Trivelli y su infinita ingerencia en los asuntos internos del país, la falta de respeto y arrogancia con que se intrometen en nuestras decisiones con esa no tan nueva extraña idea de que su democracia es un artículo de exportación (además de destrucción y de muerte)... ¡Cuánta razón tenia Benito Juárez (presidente de México, 1858-1872) al observar con tristeza que su país se encontraba tan lejos de Dios y tan cerca de los Estados Unidos! ¡O nuestro Rubén Darío reprochando al “desgraciado almirante[1] y profetizando el llanto de tantos millones de hombres![2]

Más allá de la sempiterna duda sobre el sentido de la vida, de la eterna interrogante observada en el “encorvado cuello al paso de los tristes y errantes soñadores” el poeta cuenta sus temores a Juan Ramón Jiménez, profetiza, pienso ahora, el mundo globalizado que en ese entonces un Roosevelt estaba apenas concibiendo y que ya la América india de principios del siglo pasado percibía como un hondo temblor que pasa por las vértebras enormes de los Andes... “¿Tantos millones de hombres hablaremos inglés? [...] ¿Callaremos ahora para llorar después?”[3]

En esta reflexión un siglo después observo con asombro el carácter actual de esta nuestra situación que se ha quedado casi congelada en los últimos doscientos años. La diplomacia, el sector financiero internacional, el comercio y, desde luego, la democracia (por citar escasos ejemplos) no son más que una manifestación de potencia, de dominio, de neocolonialismo que los mismos potentes siguen imponiendo al resto del mundo en su eterna búsqueda de supremacía, de poder, sin importar el río de sufrimiento y de muerte que van dejando a su paso, ya que en este juego no es quien tiene la razón que cuenta, sino quien tiene las armas más potentes... nueva era, alianza para el progreso, doctrina Monroe son tres de las miles acepciones bajo las cuales han colonizado el continente y nos han aislado del mundo civilizado apretándonos en un abrazo casi mortal, no para exterminarnos, solamente para que no nos dé tiempo de pensar, de reaccionar.

El presidente estadounidense acaba de imponer una vez más su política al mundo. También esta vez el cazador primitivo y moderno[4] desembolsará miles de millones de dólares para continuar la guerra en Irak sin importarle las verdaderas prioridades del mundo actual (en un lejanísimo continente, Darfur, Somalia, por citar sólo dos del enorme rosario de países donde miles y miles de inocentes mueren cotidianamente por la falta de alimentos y medicina – y que son realidades a nosotros lejanas pero que debemos tener presente hoy más que nunca). En su ciega ambición de poder, el representante de la casa blanca arrastra al resto del mundo a una situación que, con las premisas presentes, es un callejón sin salida que no presagia nada de bueno y no puede producir más que violencia y agudizar los conflictos en curso.

El gigante europeo observa. De igual forma observaba la subida al poder de un tristemente famoso alemán que los arrastró a un conflicto mundial que causó más de cincuenta millones de muertos y la polarización del mundo en dos áreas de influencia divididas por una cortina de hierro que parece aún exista. Cuando quisieron reaccionar con la diplomacia y con acciones más directas, era demasiado tarde y era imposible cambiar el curso de las cosas.
El sueño es que esta vez actúe el viejo continente e imponga las razones de la cultura milenaria que tienen sobre sus hombros, que negocien la paz y la modernización con reglas más equitativas, más humanas y en un ambiente donde todos opinen, todos aporten, todos se beneficien...

¿Terrorismo? Dejando a un lado el manual de la CIA y la política estadounidense de los años ochenta (del siglo pasado) esta palabra hoy cobra un poder sorprendente, espantoso. Su poder es mayor que cualquier imperio, que cualquier religión y en su nombre se cometen atroces violaciones de los derechos humanos en esa parte del globo que hoy se irgue a guía mundial, a democracia de referencia y que tiene en el puño el poder de imponer decisiones tanto en el seno del pacto atlántico como en las Naciones Unidas. Quien ha cruzado las fronteras de los Estados Unidos recordará perfectamente las miles preguntas, la arrogancia de los oficiales de policía (de origen latinoamericano) que rehúsan hablar español, la angustia de la espera infinita, la foto y las huellas digitales (como cualquier criminal) y, al fin, el respiro de alivio cuando finalmente pasas y tienes que agradecerles por el "enorme favor que te están haciendo". No importa el color de tu pasaporte, importa solamente que ellos ponen las reglas y toca al resto del mundo respetarlas... la Europa milenaria es diferente y siempre me sorprendo cuando me llaman señor y me explican con miles fórmulas de cortesía que es un control necesario... más allá de alguno que otro esporádico acto de prepotencia característico de quien tiene el poder y las armas que lo autorizan a ejercerlo. ¡Qué mundo tan diferente y extrañó hemos construido!

En mis sueños de infancia, en mis juegos de niño, imaginaba un mundo completamente diferente; en la escuela más que leer devoraba los libros admirando las proezas de quienes me habían precedido y pensando que un día, sin lugar a dudas íbamos a vivir en el mejor de los mundos posibles[5].

A finales de invierno un evento despertó en mi recuerdos que creía haber removido para siempre y motivó esta reflexión, mientras me encontraba en París acompañando a una amiga que vino a visitarnos desde California.
Estábamos haciendo la fila para entrar a la torre Eiffel y frente a nosotros estaba un grupo de niños de la escuela primaria parisina que esperaban su turno y mientras tanto conversaban amenamente de la construcción del monumento, haciendo mil preguntas a la maestra. En un abrir y cerrar de ojos recordé mi infancia matagalpina y mis libros y la emoción que sentía al leer de Rubén Darío, casi a quererme identificar con la emoción y el orgullo de ese jardín de chavales que hoy florece en un mundo mejor gracias a los sacrificios y al trabajo de sus antecesores.
Casi al llegar a la taquilla los niños abrían sus mochilitas y los guardias de seguridad controlaban minuciosamente entre los cuadernos y lápices para garantizar que no llevaran bombas ni nada que pudiera causar un ataque terrorista. Me sorprendió la mirada fija, atónita de un pequeñuelo de escasos siete años que con su tez sonrojada (casi avergonzado, diría) me miró fijamente con sus ojos verdes. En su seño leí una pregunta que me ha causado tantos desvelos y a la que no he podido dar respuesta: ¿es este el mundo que les estamos dejando en herencia?
(por: Víctor Ramón González García - Roma, Italia)

[1] A Cristóbal Colón - R.D.
[2] A Juan Ramón Jiménez (Los Cisnes) - R.D.
[3] Ab. Ídem
[4] A Roosevelt - R.D.
[5] La vana esperanza del protagonista de "Cándido o el optimismo" (de Voltaire)